La mediación familiar es un proceso clave en el sistema judicial chileno para resolver conflictos relacionados con el derecho de familia sin necesidad de llegar a juicio. Este recurso ofrece a las partes involucradas una oportunidad para llegar a un acuerdo con la ayuda de un mediador profesional, quien actúa como facilitador neutral. En este artículo, exploraremos qué es la mediación familiar, cuándo es obligatoria en Chile, cómo se solicita y cuáles son sus beneficios.
¿Qué es la Mediación Familiar?
La mediación familiar es un procedimiento legal que permite a las partes involucradas en un conflicto familiar, como divorcio, pensión alimenticia, o régimen de visitas, negociar una solución de manera amistosa y colaborativa. En Chile, la mediación es dirigida por un mediador, un profesional especializado en derecho de familia y resolución de conflictos. Este mediador no tiene la función de imponer decisiones, sino que su objetivo es ayudar a las partes a encontrar un acuerdo mutuamente aceptable.
Objetivos de la Mediación Familiar
Los principales objetivos de la mediación familiar son:
- Promover la comunicación: Facilitar un espacio donde las partes puedan expresar sus puntos de vista y preocupaciones de manera abierta.
- Fomentar acuerdos amigables: Ayudar a las partes a llegar a acuerdos que beneficien a todos los involucrados, especialmente si hay hijos de por medio.
- Reducir el conflicto: Disminuir la hostilidad y evitar la escalada del conflicto que podría complicar aún más la relación familiar.
- Evitar el juicio: Buscar soluciones que eviten procesos judiciales largos, costosos y emocionalmente desgastantes.
¿Cuándo es Obligatoria la Mediación Familiar en Chile?
En Chile, la mediación familiar es obligatoria en varios casos antes de que un juez pueda conocer la demanda. Esto se establece en la Ley de Mediación Familiar (Ley N° 19.968) y tiene como objetivo que las partes intenten llegar a un acuerdo antes de recurrir al tribunal. Algunos de los casos en que la mediación es obligatoria son:
- Pensión de alimentos: Cuando se busca establecer, modificar o cesar la pensión alimenticia para menores de edad o personas incapacitadas.
- Relación directa y regular (visitas): Si existe un desacuerdo sobre el régimen de visitas o si se desea modificar uno existente.
- Cuidado personal: Cuando se discute quién tendrá la custodia de los hijos o se desea cambiar el régimen de custodia.
En estos casos, es obligatorio asistir a una sesión de mediación antes de que el juez pueda intervenir. Si las partes no logran un acuerdo durante la mediación, recién entonces se puede llevar el caso a juicio.
Excepciones a la Obligación de Mediación
Existen algunas excepciones en las que la mediación no es obligatoria:
- Violencia Intrafamiliar: Si hay antecedentes comprobados de violencia intrafamiliar, no se exige la mediación para proteger a las partes involucradas.
- Urgencia en medidas de protección: Cuando se requiere protección urgente de un menor de edad o de una persona en situación de vulnerabilidad.
¿Cómo Solicitar la Mediación Familiar en Chile?
Solicitar una mediación familiar en Chile es un proceso sencillo y está disponible para cualquier persona que necesite resolver un conflicto relacionado con el derecho de familia. A continuación, se describen los pasos para iniciar una mediación:
1. Contactar a un Centro de Mediación Familiar
En Chile, existen centros de mediación familiar tanto públicos como privados. Los centros públicos, financiados por el Estado, ofrecen mediación gratuita para personas que cumplen con ciertos requisitos socioeconómicos. Para acceder a estos servicios, se puede acudir a la Corporación de Asistencia Judicial o buscar un centro autorizado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
2. Presentar una Solicitud de Mediación
Una vez identificado el centro, se debe presentar una solicitud de mediación, ya sea de manera presencial o en línea. En la solicitud, se deben incluir los datos personales de las partes involucradas y una breve descripción del conflicto o la materia que se desea mediar (como pensión de alimentos, custodia, etc.).
3. Asistencia a la Sesión de Mediación
El centro de mediación asignará un mediador y programará una sesión en la que ambas partes deberán asistir. Es importante mencionar que la mediación es un proceso voluntario; aunque en algunos casos es obligatoria como un requisito previo al juicio, las partes tienen la libertad de llegar o no a un acuerdo.
Durante la sesión, el mediador intentará facilitar la comunicación y guiar a las partes para que puedan llegar a una solución que les beneficie a ambas. Dependiendo de la complejidad del caso, pueden ser necesarias varias sesiones.
4. Formalización del Acuerdo
Si las partes logran un acuerdo durante la mediación, este se formaliza en un Acta de Acuerdo que tiene validez legal. El acta se presenta ante el tribunal correspondiente para que se apruebe y se convierta en una resolución judicial. En caso de que no se logre un acuerdo, se emite un Certificado de Mediación Frustrada, lo que permite a las partes continuar con el proceso judicial.
Beneficios de la Mediación Familiar
La mediación familiar en Chile tiene varios beneficios importantes, especialmente en comparación con un proceso judicial:
- Rapidez: La mediación es generalmente más rápida que un juicio, lo que permite a las partes resolver sus problemas en menos tiempo.
- Menor costo: En muchos casos, la mediación es gratuita, y si no lo es, sigue siendo más económica que un juicio, que puede implicar gastos de abogados y trámites judiciales.
- Menos estrés: Al ser un proceso menos formal y menos confrontacional, la mediación reduce el estrés emocional que puede causar un juicio, especialmente cuando hay hijos de por medio.
- Soluciones flexibles: A diferencia de un fallo judicial que puede ser rígido, los acuerdos logrados en mediación pueden adaptarse mejor a las necesidades y circunstancias particulares de las partes.
Conclusión
La mediación familiar en Chile es un recurso valioso y obligatorio en ciertos casos que permite a las partes resolver conflictos de manera pacífica y colaborativa. Con una mediación efectiva, se pueden evitar juicios costosos y prolongados, beneficiando así a las familias y, en particular, a los hijos que puedan estar involucrados en los conflictos.
Si estás considerando la mediación para resolver un conflicto familiar, contactar a un centro de mediación autorizado es el primer paso para encontrar una solución amigable y eficiente.
Preguntas Frecuentes sobre la Mediación Familiar en Chile
- ¿Es gratuita la mediación familiar en Chile? Sí, en muchos casos, especialmente en centros públicos financiados por el Estado, la mediación es gratuita para quienes cumplen con ciertos requisitos socioeconómicos.
- ¿Cuánto dura una sesión de mediación familiar? Generalmente, una sesión de mediación puede durar entre 1 y 2 horas, dependiendo de la complejidad del caso. En algunos casos, se pueden requerir varias sesiones.
- ¿Qué pasa si no se llega a un acuerdo en la mediación? Si no se logra un acuerdo, se emite un certificado de mediación frustrada, lo que permite a las partes llevar el caso ante un juez.
- ¿Puedo llevar a mi abogado a la mediación? Sí, es posible contar con la asesoría de un abogado durante la mediación, aunque no es obligatorio. La presencia de un abogado puede ser útil para garantizar que los acuerdos se ajusten a la ley.
- ¿Qué sucede si una de las partes no se presenta a la mediación? Si una de las partes no asiste, el mediador puede reprogramar la sesión o emitir un certificado de mediación frustrada, lo que permite que el caso siga su curso judicial.
- ¿Puedo solicitar mediación para modificar una pensión de alimentos existente? Sí, la mediación es un proceso adecuado para revisar y modificar acuerdos existentes, incluyendo pensiones alimenticias, siempre que ambas partes estén dispuestas a participar.